Nosotros, personas comprometidas en ser conscientes de
nosotros mismos, de los que nos rodean y de nuestro entorno, queremos
contribuir a impulsar una espiral de transformación positiva del mundo en que
vivimos. Lo hacemos desde nuestro interior y a través de las organizaciones a
las que damos vida. Así entendemos a la empresa consciente como un agente de
gran influencia en las personas y en la sociedad, que puede y debe contribuir a
un mundo mejor.
Creemos en la utopía. Nos mueven los valores del Amor,
la Alegría y la Acción. Sabemos que todos los seres humanos tenemos un ADN
sensible y una capacidad creadora y emprendedora; este movimiento convoca a
quienes decidan hacerlo visible desde la autenticidad y el compromiso con los
siguientes principios:
1º Las personas y su desarrollo han de ser
el propósito, no “recursos humanos” a emplear.
Las personas no son números ni meros recursos a
utilizar, emplear u optimizar: son el fin último a desarrollar de forma
integral. Creemos en empresas que, en lugar de empleados o subordinados, están
conformadas por personas integrantes que comparten el crecimiento
patrimonial, los beneficios económicos y la responsabilidad.
El conocimiento y la imaginación están distribuidos por
toda la organización. En consecuencia, apostamos por estimular la conducta
emprendedora interna y la superación de las estructuras de control verticales.
Reivindicamos la empresa como espacio idóneo para la
formación y pleno desarrollo de las personas como agentes de cambio social.
2º El dinero ha de ser un medio y una
consecuencia, no el fin último de la empresa.
Apostamos por un modelo de empresa productiva, en
evolución constante, que al actuar desde su propósito y valores alcanza
resultados sorprendentes de crecimiento humano, profesional y económico que son
compartidos entre todos sus integrantes.
En este modelo, los integrantes de las empresas
reinvierten en éstas en pro de su desarrollo y de la influencia positiva hacia
otros seres humanos y la naturaleza.
El dinero es por tanto una consecuencia de hacer las
cosas bien, no el fin último para ser acumulado, y menos a cualquier precio.
3º La organización ha de estar
dirigida por valores.
Nos comprometemos con una auténtica dirección por
valores: éticos, pragmáticos y emocionales. Los valores han de ser criterios de
selección, promoción y desvinculación. Se escogen y se viven de forma
participativa entre todos los integrantes. Inspiran nuestras relaciones y
gobiernan nuestras decisiones cotidianas y estratégicas.
Promovemos la libertad de tener una vida plena, con
propósito y equilibrada; de potenciar la creatividad, disfrutar en el trabajo,
pensar por cuenta propia, equivocarnos, desaprender, emocionarnos, ser nosotros
mismos y cambiar las cosas.
4º La naturaleza es un patrimonio a
preservar.
El planeta y sus recursos son el patrimonio finito de
todos los seres vivos, y de las generaciones actuales y futuras. Todo está
unido con todo y nos reconocemos interdependientes.
Sabemos que cada acto tiene consecuencias, y que toda
actividad empresarial influye en la naturaleza. Creemos en la necesidad de
mitigar los impactos negativos.
Para ello promovemos la medición de la huella ambiental;
el diseño de productos, servicios, modelos de negocio y procesos desde la
consciencia ambiental; el uso sostenible de los recursos naturales, teniendo en
cuenta su disponibilidad y si son renovables; y la minimización de los residuos
y su tratamiento responsable.
Asumimos con
entusiasmo el compromiso de impulsar el movimiento Espiral de Emprendedores
Conscientes y de apoyar a quienes quieran vivir con estos principios.
¡Otra consciencia emprendedora es posible,
ENTIDADES Y EMPRESAS IMPULSORAS
El Movimiento Espiral está inicialmente impulsado por la
Universidad de Barcelona (proyecto de Cátedra de Innovación Social) y por la
Fundación Consultores sin Fronteras.
Empresas fundadoras:
Grupo Alpha, Venezuela
Equitel, Colombia
4d-life, España
Vitalia, España
Infojobs, España
ASM
Web Services, España